La barba es un elemento que ha cobrado especial relevancia dentro de la estética del hombre. Es por esto que cada vez más personas acuden a barberías y realizan rutinas diarias de cuidado de la barba para lucirla impecable en todo momento. Sin embargo, un gran porcentaje de hombres sufren lo que se conoce como alopecia en la barba. La falta de crecimiento de vello facial, algunas enfermedades o traumatismos son algunos de los factores que impiden a muchos hombres presumir de barba.

En el blog de Hospital Capilar te contamos toda la información sobre la alopecia en la barba: qué es, cuáles son las principales causas y tipos, y cómo es posible ponerle solución.

¿Qué es la alopecia en la barba?

La alopecia en la barba se define como la falta o pérdida de vello en la barba, lo que impide el desarrollo completo de la misma. Esto suele causar complejos físicos entre quienes lo sufren repercutiendo, incluso, en su salud mental. En consecuencia, se ha experimentado un aumento en las clínicas capilares de España de consultas sobre injerto de barba y tratamientos médico capilares orientados a fomentar el crecimiento de vello facial.

Tipos de alopecia en la barba

La alopecia en la barba se manifiesta de diferentes formas en función del tipo de alopecia de barba que se trate. Es por esto que resulta clave acudir a una clínica capilar donde recibir un diagnóstico médico y poner, así, el tratamiento más efectivo en cada caso.

De la misma manera que los síntomas de la alopecia en la barba varían en función del tipo que se trate, el tratamiento también.

Alopecia en la barba de tipo hormonal

La alopecia en la barba más común entre los hombres es la de tipo hormonal y genético, y así lo indica el equipo médico de Hospital Capilar. En estos casos, durante la pubertad no se desarrolla la barba completa. La falta de densidad es notoria pero, sin embargo, es el tipo de alopecia en la barba más fácil de tratar.

Alopecia areata en la barba

Otra de las manifestaciones más habitual de calvas en la barba es la alopecia areata en la barba. A diferencia de la de tipo genético y hormonal, la alopecia areata en la barba se manifiesta con la aparición de calvas redondeadas muy características.

La alopecia areata en la barba se entiende como una enfermedad inmunológica. En estos casos es el propio sistema inmunitario del paciente el que ataca a los folículos pilosos impidiendo el crecimiento capilar. Factores como el estrés o la ansiedad pueden agravar los síntomas de la alopecia areata en la barba.

Falta de densidad en la barba por foliculitis

El desarrollo de enfermedades cutáneas como la foliculitis son también el origen de calvas en la barba y falta de densidad en la zona. La foliculitis se trata de la inflamación del folículo piloso provocado por un mal afeitado, infecciones bacterianas o la proliferación de hongos en la piel. Se presenta como pequeñas espinillas con pus o pústulas que, si no se tratan adecuadamente, pueden llegar a volverse crónicas impidiendo el crecimiento normal del vello facial.  

Calvas en la barba por traumatismos o cicatrices

Toda la gama de alopecias cicatriciales también impide tener una barba completa. Cuando sufrimos quemaduras en la zona o aparecen cicatrices después de un traumatismo, los folículos pilosos pueden desprenderse impidiendo que crezca el vello en esa zona. En estos casos, la alopecia en la barba es muy localizada.

Lupus

El lupus es una enfermedad que afecta al sistema inmunitario y puede llegar a ser grave. Esta enfermedad provoca una inflamación general del cuerpo que afecta también a la salud capilar. Los folículos pilosos se inflaman haciendo que el pelo se debilite y que, incluso, se desprenda de manera permanente. Aunque lo normal es que cuando esto ocurre afecta al cabello, la barba también es susceptible de ello.

Tiña en la barba

La tiña en la barba es una infección fúngica que afecta a las primeras capas de la piel. La proliferación de este hongo provoca enrojecimiento de la zona afectada, descamación y formación de costras, además de picazón. En estos casos, los folículos pilosos de la barba pueden verse afectados dando lugar a una falta de densidad en la zona infectada.   

Tratamientos para recuperar la densidad en la barba

Como hemos comentado anteriormente, los tratamientos para la alopecia en la barba varían en función del tipo de alopecia o enfermedad que cause esa pérdida de densidad en la barba. Para ello, recibir un correcto diagnóstico médico es fundamental para recurrir al tratamiento más eficaz en nuestro caso en particular.

Uso de Minoxidil tópico

Una de las soluciones más extendidas para ganar densidad en la barba es con un fármaco denominado Minoxidil, normalmente empleado de manera tópica en estos casos. Se trata de un vasodilatador que fomenta la vascularización de los folículos pilosos consiguiendo que el pelo aumente su grosor y calidad. En pacientes con una barba despoblada causada por un desajuste hormonal de tipo genético, es una buena opción en combinación con el injerto de barba.

El Minoxidil oral es una solución muy extendida también en casos de alopecia en el cuero cabelludo, lo cual se suele combinar con el injerto capilar FUE para repoblar aquellas zonas donde ya no crece el pelo de manera natural.

Empleo de corticoides

Para tratar la alopecia areata en la barba lo habitual es recomendar el empleo de corticoides tópicos o de manera intradérmica mediante inyecciones en la zona afectada por esta enfermedad autoinmune.

Antimicóticos

Cuando las calvas en la barba son provocadas por tiña, es necesario tratar la infección con antimicóticos. En los casos en los que la foliculitis es la causante de la falta de densidad, el médico puede recetar antibióticos orales. Una vez tratada la infección en cuestión, es posible recurrir a otro tipo de tratamientos como el implante de barba para obtener una barba con mayor densidad.

Injerto de barba FUE

El injerto de barba FUE es la técnica más demandada en la actualidad para tener pelo en aquellas zonas donde no crece de manera natural o se ha perdido. Se trata de una técnica ambulatoria, poco invasiva, mediante la cual se extraen las unidades foliculares necesarias de la zona baja de la nuca del paciente y se implantan en la barba respetando el diseño y forma escogidos por el paciente.

Los resultados de un implante de barba se dan de manera definitiva una vez transcurrido el primer año tras la intervención. Sin embargo, a los seis meses ya se puede ir apreciando el crecimiento de nuevo pelo.