Se estima que aproximadamente el 60% de la población tiene una cicatriz, habitualmente provocada por una intervención quirúrgica o por un traumatismo. Cuando esas cicatrices se dan en el cuero cabelludo, los folículos pilosos se dañan impidiendo que el pelo vuelva a crecer. En muchas ocasiones esto tiende a provocar en la persona inseguridad y complejos estéticos pero, ¿es posible ocultar las cicatrices de alguna forma? ¿Se puede llevar a cabo un injerto capilar en cicatrices?

Desde Hospital Capilar, clínica experta en injerto capilar en Madrid, Murcia y Pontevedra, te contamos todo lo que debes saber sobre el injerto capilar en cicatrices. ¿Es posible? ¿Se consiguen buenos resultados?

¿Se puede hacer un implante capilar en cicatrices?

El injerto capilar en cicatrices en general sí es viable para cubrir la calva generada por dicha cicatriz. Sin embargo, no en todos los casos se consiguen los resultados esperados ya que la piel es distinta.

Cuando se origina una cicatriz, ésta da lugar a lo que se conoce como tejido cicatricial. La dermis se altera y pasa a estar más dura y menos elástica. Esto requiere que el diagnóstico médico sea mucho más minucioso que en un implante capilar rutinario, ya que el médico deberá evaluar el estado de la cicatriz, sobre todo en términos de vascularización.

Por otro lado, no encontramos únicamente un tipo de cicatriz, sino que éstas pueden aparecer por diversos motivos. En función de la cicatriz en cuestión, las posibilidades de obtener un buen resultado estético varían, y así lo indica el equipo médico de Hospital Capilar.

Cicatrices por quemadura

En los casos en los que la cicatriz se debe a una quemadura, es más complicado que los folículos trasplantados agarren y no caigan, aunque no es imposible. Hay que tener en cuenta que la piel tras haber sido quemada está excesivamente dañada, por lo que las posibilidades de supervivencia son menores. Aun así, nuevamente, el cirujano capilar evaluará la cicatriz y determinará cómo proceder, así como la viabilidad de la intervención.

Cicatrices quirúrgicas o por traumatismos

Las cicatrices quirúrgicas o por traumatismos no suelen suponer un gran inconveniente a la hora de realizar un implante capilar. Si el proceso de curación de la misma ha finalizado y la vascularización de la piel es la adecuada, el injerto capilar con técnica FUE es una buena opción para cubrir cicatrices.

Alopecia cicatricial

Existen varios tipos de alopecias entre las que se encuentran las cicatriciales. Estas alopecias cicatriciales, como su nombre indica, generan tejido cicatricial provocando la aparición de calvas en la piel afectada. En estos casos, antes de valorar la posibilidad de realizar un implante capilar es fundamental recurrir a otro tipo de tratamientos para estabilizar la alopecia. De lo contrario, el cabello implantado puede salir en la zona intervenida pero volverá a caer si la enfermedad en cuestión no ha sido tratada.

Proceso de un injerto capilar en cicatrices

La clave, como hemos comentado anteriormente, para saber si podemos realizarnos un injerto capilar en cicatrices es acudir a una clínica capilar donde recibir un diagnóstico de manos de un médico especialista. Si el cirujano da el visto bueno y la intervención cumplirá las expectativas del paciente, éste sí podría optar por el injerto capilar en cicatrices para cubrirlas.

El proceso del implante capilar sería el mismo. En Hospital Capilar realizamos este tipo de intervenciones con la técnica FUE (Follicular Unit Extraction). Se trata de un método que no deja cicatrices visibles y conseguimos los resultados más naturales. 

Diseño de las zonas receptora y donante

El día de la cirugía, lo primero que se lleva a cabo es el diseño de las zonas receptora y donante. El cirujano al cargo es quien lo ejecuta teniendo en cuenta el criterio y gustos del paciente, así como la fisionomía del mismo. Una vez delimitadas las zonas a cubrir y el área de extracción, el paciente pasa a quirófano.

Aplicación de anestesia local

El trasplante capilar no requiere de anestesia general. Únicamente se emplea anestesia local, por lo que al finalizar la cirugía podrá regresar a su domicilio con normalidad. Eso sí, en Hospital Capilar no recomendamos conducir después del injerto capilar.

Esta fase de la intervención es la única que causa cierto dolor y, por ello, en nuestras clínicas capilares en España ponemos al servicio de nuestros pacientes la preanestesia con la que conseguimos reducir considerablemente el dolor de la propia anestesia.

Extracción de las unidades foliculares

Cuando la zona está dormida, el equipo sanitario procede a extraer las unidades foliculares necesarias para cubrir la zona a tratar. Esto se lleva a cabo de manera individual con un punch con micromotor reduciendo al máximo la posibilidad de dañar los folículos colindantes.

Fase de incisiones en el área a cubrir

El cirujano procede a realizar las incisiones con un bisturí de zafiro en la zona receptora. Esto supone un ejercicio de precisión por parte del profesional, el cual tendrá en cuenta ciertos aspectos como la angulación, la dirección del pelo y el diseño, entre otros.

Implantación de las unidades foliculares

El último paso con el que damos por finalizado el implante capilar FUE es la implantación de las unidades foliculares previamente extraídas. A partir de este momento, el paciente regresa a su domicilio y comienza el posoperatorio del injerto capilar.