Turquía ha pasado a ser uno de los destinos más frecuentes para quienes buscan ponerle fin a la calvicie con un injerto capilar. Aunque el atractivo de este país es su precio tan económico, es conveniente considerar todas las implicaciones antes de tomar una decisión. El injerto capilar, aunque ambulatoria, es una cirugía en la que malas praxis pueden suponer un riesgo importante y afectar tanto a la salud como a los resultados del tratamiento.
REVISADO POR COMITÉ MÉDICO
Un gran número de clínicas de injerto capilar en Turquía afirman la alta demanda de este método para recuperar el pelo en el país. ¿Pero cuál es el principal motivo por el que miles de personas viajan a Turquía para su implante capilar?
En la mayoría de las ocasiones por los que muchos deciden realizar su injerto capilar en Turquía es el precio. El implante capilar en este país es potencialmente más barato que en otros países de Europa principalmente por sus bajos costes laborales y operativos, además de por estar subvencionado por el gobierno turco. Mientras que actualmente el injerto capilar en España cuesta entre 3.000 y 5.000 euros, en Turquía puede encontrarse por algo más de 1.000 euros.
Sin embargo, el ahorro económico puede tener un precio alto en términos de calidad y seguridad.
Aunque el precio es un factor a valorar a la hora de realizar un trasplante capilar, no debe ser el único que condicione nuestra decisión. Como hemos comentado antes, el injerto capilar es una intervención quirúrgica que requiere de profesionales cualificados, preoperatorio, posoperatorio, revisiones y curas, entre otros. Esto evidentemente se ve limitado cuando la cirugía se lleva a cabo en otro país.
Uno de los mayores problemas con los injertos capilares en Turquía es la falta de seguimiento adecuado. Al tener que desplazarnos, el seguimiento posoperatorio la mayoría de las veces es remoto, con consultas online, incluso en algunos casos son inexistentes.
En caso de surgir algún problema o complicación, el paciente operado en Turquía no cuenta con la misma facilidad de acceso al cirujano capilar o al equipo sanitario que de haberlo hecho en el país de origen. En clínicas de injerto capilar en Turquía a menudo el seguimiento se limita a unas pocas indicaciones generales por correo o teléfono, sin posibilidad de revisiones presenciales.
Las clínicas capilares en España ofrecen estándares de calidad y garantías superiores a las de Turquía, además de verse obligadas a cumplir con los requisitos pautados por la sanidad española. En este sentido, la legislación sanitaria en España es mucho más estricta, lo que asegura que las clínicas realicen las cirugías bajo normativas que protegen al paciente.
Por otro lado, en España son médicos especializados en cirugía capilar y un equipo sanitario específicamente formado quienes ejecutan el injerto capilar.
El precio es sin duda un aspecto crucial por el esfuerzo económico que supone en la mayoría de las veces este tratamiento. Pero la comodidad y la tranquilidad durante el proceso son también fundamentales. Realizarse un injerto capilar en España permite no recorrer grandes distancias, no tener que preocuparse por el idioma, diferencias culturales o complicaciones relacionadas con el viaje. Además, el seguimiento pre y posoperatorio, así como las revisiones médicas. son mucho más accesibles y frecuentes garantizando de esta forma una mayor calidad en la atención tras la intervención.
Un injerto capilar mal hecho puede tener consecuencias tanto a corto como a largo plazo en el paciente.
La falta de higiene en algunas clínicas puede derivar en infecciones. Una clínica que no cumpla con los estándares de esterilización adecuados pone en riesgo la salud del paciente.
Si el procedimiento quirúrgico no se realiza adecuadamente, puede causar necrosis en el cuero cabelludo provocando la pérdida irreversible del pelo en las áreas afectadas.
Cuando no se realiza un correcto manejo, se pueden generar cicatrices visibles y antiestéticas difíciles de disimular.
Una mala praxis del cirujano en las incisiones puede provocar que el pelo implantado crezca en diferentes direcciones generando un efecto visual antiestético y poco natural.
La falta de experiencia del equipo médico puede resultar en una mala implantación de los folículos provocando a su vez que muchos de ellos no sobrevivan y no crezcan.
Si tras un implante capilar se presentan complicaciones y no se pone una pronta solución, los resultados se ven seriamente comprometidos pudiendo perder el cabello implantado. En los casos más graves, aunque no se dan con frecuencia, puede llegar a verse comprometida la salud del paciente.
La respuesta depende de cada uno y de lo que cada persona considere prioritario. Si buscas un injerto capilar barato, Turquía sin duda es tu mejor opción. Si, por el contrario, buscas un procedimiento seguro, con garantías y un seguimiento adecuado, no es conveniente viajar a Turquía para hacerlo por la falta de seguimiento presencial, las pocas garantías que ofrecen y el riesgo de complicaciones.
Una excelente alternativa es elegir una clínica en España que ofrezca todo incluido: procedimientos realizados por médicos especialistas, seguimiento presencial y resultados garantizados. Aunque los precios pueden ser más altos que en Turquía, el nivel de seguridad, las garantías y la comodidad durante todo el proceso hacen que la inversión valga la pena. En España, las clínicas ofrecen estándares de calidad que aseguran los mejores resultados posibles, eliminando la incertidumbre y los riesgos asociados con un injerto capilar en el extranjero.
En resumen, si lo que buscas es calidad, garantías y tranquilidad, la mejor opción es optar por el injerto capilar en España.
En Hospital Capilar encontrarás un equipo médico cualificado y con una gran experiencia en cirugías capilares. Con clínicas en Madrid, Murcia y Pontevedra podrás realizar tu implante capilar en España con total confianza.
Nº Reg. Sanitario Pontevedra: C-36-003121 Nº Reg. Sanitario Madrid: C517593 Nº Reg. Sanitario Murcia: 40004094
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