Entre las alternativas naturales para frenar la caída del cabello encontramos la acupuntura. Se dice que con esta antigua práctica oriental es posible combatir los efectos de una alopecia, pero, ¿hasta qué punto funciona la acupuntura para la caída del pelo?

En Hospital Capilar, clínica experta en medicina capilar en Madrid, Murcia y Pontevedra, te contamos todo lo que debes saber sobre esta práctica cada vez más demandada. ¿Merece la pena la acupuntura para la caída del pelo? ¡Toma nota!

¿En qué consiste la acupuntura para la caída del cabello?

Una pérdida capilar inusual es un problema muy común al que, cada vez más personas, desean ponerle solución. Por ello, recurrir a este tipo de remedios naturales ha pasado a ser una práctica muy extendida, pero, ¿hasta qué punto son eficaces?

La acupuntura es una técnica ancestral dentro de la medicina china mediante la cual se obtienen múltiples beneficios, no sólo en el plano capilar, sino para la salud en general. Consiste en la aplicación de agujas en puntos estratégicos del cuerpo que logran la estimulación de la circulación, entre otros.

¿Es realmente efectiva la acupuntura para frenar la caída del pelo?

Además de para dejar de fumar o bajar de peso, otra de las propiedades que se le atribuyen a esta práctica es la de frenar la caída del cabello. Se dice que mediante la estimulación del sistema circulatorio, el cuero cabelludo se oxigena y nutre lo que frena la caída capilar. No obstante, no existen evidencias científicas de que esto favorezca la salud capilar y trate una pérdida capilar. Hoy en día sí existen otro tipo de tratamientos efectivos con los que tratar una caída estacional, pérdida capilar por estrés o algún tipo de alopecia.

Ante una caída del pelo aguda que acompañe con falta de densidad y aparición de áreas calvas, lo recomendable es acudir a una clínica capilar experta para recibir un diagnóstico médico. De esta forma obtendremos un tratamiento eficaz acorde a nuestras necesidades.

Tratamientos efectivos para tratar la caída capilar

La alopecia es una enfermedad muy extendida en nuestro país, y así lo indica el índice de alopecia en España. Sin embargo, actualmente existen tratamientos médicamente efectivos que ofrecen resultados visibles. En cualquier caso, es imprescindible un diagnóstico médico previo y, en Hospital Capilar, te lo ofrecemos sin coste. 

Uso de fármacos orales

La alopecia, igual que ocurre con otro tipo de enfermedades, es posible tratarla con fármacos orales. En función del tipo de alopecia del que se trate, el médico especialista recomendará uno u otro y emitirá la receta pertinente, ya que es la única forma de acceder a ellos.

Tratamientos médico capilares

Hay para quienes el consumo diario de medicamentos supone un inconveniente. En estos casos, incluso como complemento al consumo de estos fármacos, podemos recurrir a tratamientos médico capilares. En Hospital Capilar disponemos del Hair Redensification Treatment, o HRT, y el Capillary Regeneration Treatment, o CRT. Estos tratamientos de mantenimiento contribuyen al fortalecimiento de los folículos pilosos, fomentan la regeneración capilar y frenan la caída del cabello provocada por una alopecia o efluvio telógeno consiguiendo un cabello de mayor calidad.

Injerto capilar FUE

Cuando la alopecia ya ha avanzado lo suficiente como para tener zonas sin pelo, los tratamientos capilares mencionados anteriormente no harán que vuelva a crecer pelo en aquellas zonas donde dejó de hacerlo de manera natural. En estos casos la única forma de volver a tener cabello es con el injerto capilar.

El implante capilar con técnica FUE, Follicular Unit Extraction, es una cirugía poco invasiva, ambulatoria, en la cual se extraen las unidades foliculares de la zona que no está afectada por la alopecia para implantarlas en el área sin pelo. Para poder someternos a esta intervención es imprescindible un análisis capilar previo por parte del equipo médico para determinar si el paciente es apto.

Los resultados de esta técnica son naturales y permanentes. Éstos se dan definitivamente al año de la cirugía, aunque a los 6 meses ya se pueden apreciar los primeros cambios.