La caspa es una afección del cuero cabelludo que afecta a la mitad de la población mundial. La desarrollan de igual manera tanto hombres como mujeres y, aunque no suele suponer un problema grave de salud, sí es cierto que cursa con molestias que pueden llegar a incomodar en exceso. Además, en algunos casos la caspa puede ser el origen de otro tipo de problemas capilares. En este sentido, ¿la caspa provoca caída del pelo? ¿Puede la caspa ser el origen de una alopecia?

Desde Hospital Capilar, clínica experta en cirugías capilares en España, te contamos hasta qué punto la caspa provoca caída del pelo, qué es y por qué se origina en realidad la caspa.

¿Qué es la caspa?

La caspa es una alteración donde se produce la descamación del cuero cabelludo, la cual genera a su vez la acumulación de escamas blanquecinas por todo el cabello. Esto genera inflamación y enrojecimiento de la zona, además de síntomas como picor, escozor y quemazón.

Esta afección puede darse también en otras zonas del cuerpo como cejas, barba, tronco y zona retroarticular. Por diferentes causas, la piel genera un aumento en la secreción de sebo lo que altera la microbiota cutánea. Esto hace que prolifere un hongo denominado Malassezia, el cual es el responsable de la aparición de la caspa en el cuero cabelludo. La piel renueva las células de forma natural y descarta las antiguas, sin embargo, cuando la Malassezia prolifera muy deprisa, las células muertas del cuero cabelludo se acumulan y forman las escamas blanquecinas.

Normalmente la caspa se desarrolla por alteraciones hormonales, estrés o una mala higiene. La predisposición genética de la persona a padecerlo juega también un papel importante, además de algunas alteraciones inmunológicas que favorecen la aparición de caspa en el cuero cabelludo.

¿La caspa provoca caída del pelo?

La caspa se acumula en el cuero cabelludo en forma de escamas blanquecinas. Esto hace que sea común pensar que la caspa provoca caída del pelo, aunque no es cierto del todo.

No se puede afirmar que la caspa provoca caída del pelo como tal, ya que, según los médicos de Hospital Capilar, no se identifica como el origen de una alopecia. Sí es cierto que existe cierta relación entre seborrea y alopecia, ya que un exceso de grasa en el cuero cabelludo impide que los folículos pilosos funcionen correctamente. Además, los síntomas que acompañan a la caspa, tales como picor o escozor, llevan a la persona a un rascado excesivo e intenso dañando, así, los folículos pilosos pudiendo provocar la posterior caída del cabello.

En cualquier caso, no es cierto que la caspa provoca caída del pelo ni tampoco es el origen de una alopecia. En los episodios de caspa o dermatitis seborreica más graves pueden provocar el debilitamiento del pelo y su posterior caída, pero normalmente el cabello volverá a crecer ya que se produce un daño folicular, como sí ocurre con la alopecia androgenética, la más común de todas.

Es importante cuidar el cabello y acudir a un especialista si presentamos un episodio agudo de caspa o la padecemos de forma reiterada principalmente para mantener el cuero cabelludo y el cabello sano.

Factores que provocan caída del cabello

A diferencia de la caspa, existen factores que producen una caída del cabello inusual. Hay que tener en cuenta que el pelo se cae diariamente, alrededor de 100 cabellos diarios, y esto es algo normal. El cabello tiene su propio ciclo de vida donde nace, crece y termina por desprenderse en su fase telógena. En condiciones normales, el pelo que cae vuelve a salir y a comenzar, nuevamente, otro ciclo de vida. Cuando la caída del pelo es más intensa, apreciamos más cabellos en cepillos o almohadas y, además, acompaña con pérdida de densidad, es posible que se produzca por alguno de estos motivos.

Alteraciones hormonales

Un desajuste hormonal suele ser la causa más habitual cuando el cabello que cae no vuelve a salir y, en consecuencia, acompaña con zonas sin pelo como entradas o coronilla, o la raya más ancha en el caso de las mujeres. En estos casos estamos ante una alopecia androgénica, la cual afecta tanto a hombres como a mujeres y es importante tratarla en manos de profesionales médicos en clínicas capilares especializadas, ya que es una caída capilar no reversible. 

Estrés

Cuando vivimos fuertes episodios de estrés, el aumento en los niveles de cortisol del organismo provoca lo que se conoce como efluvio telógeno. Normalmente se trata de una caída capilar reversible, en la cual el pelo que cae volverá a crecer. No obstante, si la caída se prolonga en exceso o acompaña con pérdida de densidad, podemos recurrir a tratamientos capilares para solucionarlo lo antes posible.

Mala alimentación

Los déficits nutricionales son también otro factor que propicia la caída del cabello. Los folículos pilosos necesitan de una serie de nutrientes para funcionar adecuadamente y, cuando se produce la falta de alguno de ellos, pueden debilitarse y generar un efluvio telógeno. La caída en estos casos se soluciona una vez solucionado el problema de alimentación de base.

Enfermedades autoinmunes

Existen algunos tipos de alopecias que se dan por enfermedades autoinmunes, como es el ejemplo de la alopecia areata. En estos casos, es el propio sistema inmunológico de la persona el que ataca a los folículos pilosos por error provocando su destrucción. En estos casos, la caída no es reversible y el pelo que cae normalmente no volverá a crecer.

Tratamientos para frenar la caída del pelo

Aunque puede provocar otro tipo de problemas de salud capilar, no es cierto que la caspa provoca caída del pelo como tal, no se identifica como una causa concreta. Sí es cierto que puede agravar el proceso de caída en procesos como los mencionados anteriormente: una alopecia androgénica o un efluvio telógeno. Por lo tanto, es imprescindible un correcto diagnóstico médico para saber cuál es el tratamiento más recomendable en nuestro caso en particular para frenar la caída del cabello.

En la actualidad existen tratamientos médico capilares eficaces para frenar la pérdida capilar. Entre los más demandados se encuentra la mesoterapia capilar o el Plasma Rico en Plaquetas, los cuales se orientan a mejorar la calidad del cabello, fomentar su crecimiento y tratar la alopecia. En los casos en los que el pelo que cae ya no vuelve a crecer, la única forma de recuperar ese pelo es con el injerto capilar FUE. La caspa no es impedimento para realizar un injerto capilar, únicamente es necesario tratarla con productos y fármacos antes de la intervención.

En nuestra clínica capilar de Madrid, además de la que podrás encontrar también en Murcia o en Pontevedra, podrás ponerle fin a la alopecia con este tipo de tratamientos, previa valoración médica.